Reforma integral para un ático de obra nueva donde nuestra intervención se centró en unificar materiales y darle todo el protagonismo a la LUZ NATURAL gracias a las paredes de cristal que nos permitieron crear nuevos cerramientos para la zona de estudio infantil y para la zona de despacho de nuestros clientes. De esta forma evitamos un pasillo largo y oscuro consiguiendo que la luz del exterior llegara a todos los rincones de la vivienda. Al mismo tiempo conectamos salón y cocina a una gran terraza exterior logrando una gran sensación de amplitud.
La selección de materiales y el mobiliario para este proyecto fue sencilla: piedra caliza tanto en el interior como en el exterior, pintura a la cal en las paredes y madera de roble natural en toda la carpintería.
Para nuestros clientes uno de los requisitos más importantes era, crear un hogar sano y ecológico con materiales libres de toxinas en la medida de lo posible.
Las texturas aportadas en este trabajo las encontramos en las paredes de microcemento utilizado en baños y en las zonas de exterior, en los antepechos de los despachos, uno en piedra caliza acanalada y el otro con paneles forrados en papel.
El resultado, una vivienda atemporal lista para recibir los objetos personales de esta familia.